1. Que ellos sean los que compren
Cuando son los padres los que pagan y ellos los que eligen, no tendrán reparos al escoger el producto más caro, sin pensar en cuánto dinero les queda o si pueden hacer una mejor inversión. Pero si les da el dinero para que sean ellos los que elijan qué comprar, con la única condición de que no les dará más, comenzarán a realizar elecciones más inteligentes.
2. Que se ganen la mesada
En algunas familias se tiene como costumbre dar a los hijos un monto de dinero para que puedan cubrir “sus gastos”; sin embargo, una buena idea para que empiecen a entender la mecánica del trabajo es otorgar ese dinero a cambio de la realización de tareas. Puede ser tan simple como lavar los platos, barrer la sala, cortar el pasto, etc.
Productos Personalizados
Por supuesto, esto no debería mezclarse con aquellas que son propias de su responsabilidad como ordenar su cuarto y tender su cama.
3. ¡Que inviten algo!
Ahora que están ganando dinero, deben aprender que todas las cosas cuestan, incluyendo todas las veces en que salen a comer. Para mejorar la lección, no estaría mal que un domingo sean ellos quienes compren los helados o algo parecido. Está demás decir que todo debe ir de acuerdo al presupuesto que tengan y sin avisar.
4. Motívelos a ahorrar
Parte de lo que reciben debería ir a una cuenta de ahorros, así se trate de una pequeña cantidad. Lo que puede hacer es comprarles una alcancía y a fin de mes, llevarlos al banco para que ellos mismos depositen ese dinero en una cuenta de ahorros que puede abrir para ese fin. Son solo cuatro consejos que le ayudarán a cambiar la perspectiva que sus adolescentes tienen del dinero y cómo se relacionan con él. Por supuesto, la mejor enseñanza tiene que ver con el ejemplo.
¿Está usted ahorrando y pagando sus deudas a tiempo? Entonces, si aún no tiene una cuenta de ahorros, es momento de buscar la mejor opción y obtener una. Para comparar las opciones y ver qué cuenta le paga más intereses, puede utilizar comparadores web como el de Comparabien.