La cima

Nuestra gente está plagada y enferma comprando boletos de lotería pensando que es la única manera de tener riqueza. Las probabilidades de ganar la lotería son casi cero. Pero la probabilidad de acumular riqueza se vuelve real cuando se dedica a imitar a personas que ya lo lograron.

En otras palabras si hace lo que hacen los ricos, usted se vuelve rico; si hace lo que hacen lo pobres, usted se vuelve pobre. Tenemos que poner la mirada a dónde vamos y a dónde queremos llegar. Es como en el fútbol, no me mande el pase a donde estoy porque ya arranque, pon el pase enfrente de mí.

Cuando levanta la mirada, cambia su actitud. Los cambios que le va a tomar dejan de ser sacrificios y se vuelven el medio para llevarme a dónde quiero ir; y ¿a dónde vamos? Vamos a la cima o la independencia financiera.

La independencia financiera es cuando su dinero o sus bienes generan más dinero de lo que usted genera. Esto es como subir la montaña en bicicleta. Yo me acuerdo lo difícil que era subir. Llegaba con todo el vuelo pero me quedaba a la mitad. Cuando se acaba el vuelo empieza el zigzag. ¿Se acuerdan?

A veces le daba poquito para abajo para agarrar vuelito y tratar de subir poco a poco. Pero usted sabe que si llega a la cima viene la bajada.

Donde ya no tiene que pedalear y solo siente el aire como le pega en la cara y hasta una lagrimita se le sale. Así que, pedalea, corre, suda, trabaja duro para llegar a la independencia financiera con una enorme sonrisa. Imagínese, el jubilarse sin ser un dependiente del gobierno o peor de sus hijos. Puede dejar de trabajar porque su dinero ahora produce lo que usted producía o hasta más porque el dinero trabaja 7 días por semana 24 horas al día.

Esa es la cima, la independencia financiera, eso es paz, eso es cambiar las generaciones que vienen; eso es vivir como ningún otro.