
A nadie le gusta atrasarse en las cuotas de sus créditos, pero es la realidad de muchas personas al enfrentar emergencias o cambios que ocasionaron que sus ingresos se redujeran, y como consecuencia, no les alcanzara para pagar la cuota mensual del crédito que solicitaron.
Antes de tener a los bancos o financieras encima, llamándolos todos los días para recordarles su deuda, muchos deciden recurrir a las llamadas reparadoras de crédito, entidades que prometen ayudarlos a salir de la mora. Aunque existen muchas empresas dedicadas a este rubro y que operan bajo la ley, en los últimos meses se han dado a conocer diferentes casos de estafas ligadas a ese tipo de organizaciones.
Las supuestas reparadoras, ofrecen deshacerse de la deuda por un monto más bajo del normal, pidiéndole a los interesados un adelanto de la tarifa a modo de garantía; sin embargo, una vez que reciben el efectivo, pasa el tiempo y no hacen sino desaparecer. La persona interesada continúa en mora y adicionalmente, perdió el dinero que dio a modo de adelanto.
Si ha caído en mora, recuerde que las negociaciones deben hacerse directamente con el banco o la entidad financiera a la que solicitó el préstamo. Lo idea es comentarles cuanto antes acerca de los inconvenientes que tiene para realizar los pagos y buscar llegar a un acuerdo, estableciendo un nuevo cronograma de pagos. Esto será más fácil de realizar si conversa con ellos antes de caer en un atraso.
Johanna Bernuy | Periodista y blogger